…A yer tuvimos un día espléndido y la gente salió a hacer el mercadillo de “las pulgas” como le llaman. Anteriormente había llovido mucho y hoy se mantiene nublado. Pensaba sacar hoy una foto de la cordillera que ayer se veía preciosamente nevada y un cielo azul que la enmarcaba y la hacía más bella. Hoy casi ni se ve. Hay momentos en que también el tiempo nos habla diferente…
Ayer sábado celebramos el día de San Alberto Hurtado, un jesuita chileno, canonizado en el 2005. le quieren muchísimo y nada menos que al mes de agosto le llaman el mes de la solidaridad porque san Alberto fue el fundador de los hogares del “Cristo en la calle” (acogía a todos los que encontraba debajo del puente o en cualquier otro lugar desapacible o despoblado), además de otras actividades que llevaba entre manos. Por eso, salimos ayer por la tarde a pedir por las casas alimentos no perecederos para las familias necesitadas.
Como los sábados tenemos aquí la misa del domingo, vino el párroco a celebrarla y después estuvo con nosotras tomando el té y charlando a gusto un buen rato. Después fuimos juntos a rezar a la casa de una persona fallecida y, además, para acompañar a su familia. Siempre la muerte nos mueve por dentro y nos sentimos todos igual de pequeños y necesitados del amor misericordioso de Dios y de la cercanía y cariño de los demás.
Esta semana que viene no nos faltan cosas por hacer : Preparar la celebración de los 60 años de la vida Ursulina de Teresina ; el jueves : Consejo de Pastoral ; el miércoles o viernes tengo encuentro de Comunidades de Base ; además preparar temas y nuestro encuentro de comunidad para los trabajos misioneros…A pesar de todo deseamos que el sosiego nos envuelva y podamos hacer las cosas una detrás de otra…
Aquí he aprendido a « asesorar a la chilena » y lo digo con cariño y agradecimiento porque al venir para Santiago dejé todo aquello que me podía haber servido para la pastoral de lo que una va acumulando de recursos y en el « vacío » en el que me sentía, el Señor me esperaba, una vez más : sólo hacía falta, tiempo, paciencia y confianza.
Poco a poco, la luz ilumina y los recursos van llegando y la gente que me acoge es lo que más aprecio. No es que me crezca, no, pero una se siente con ánimo de dar lo que tiene y de aprender mucho más.
Ya se nota que el curso está en su recta final, se « apuran » las cosas y como que quisiéramos que nada se quede para el año que viene. El calendario está repleto pero sólo decir de una actividad que me llama la atención : Aquí la Iglesia se financia por su cuenta y nuestra Parroquia se las arregla como puede para mantenerse económicamente.
Nuestra capilla igualmente tiene que buscarse los medios y para ello el 10 de Noviembre tenemos el BINGO : es todo un montaje de participación y ejemplo del interés que los cristianos-católicos, ponen en mantener su capilla. La preparación y el trabajo no es poco, yo admiro en ellos el esfuerzo que no escatiman. El bingo no lo he vivido pero pienso que será una fiesta y tendrá un buen resultado. Les felicito desde hora.