Estoy muy contenta de formar parte de los Amigos del Carisma de la Realidad Misionera de Canadá.

Les agradezco la calurosa acogida que me dieron cuando, el domingo 23 de junio de 2024, nos reunimos para rezar, apoyarnos, cuidarnos y amarnos cuando fuimos al Lago Ste. Anne, un lugar sagrado de nuestros Pueblos Indígenas, conocido también como Wakamne o Lago de Dios . Cuando el P. Les, OMI, nos contó que el P. Lestanc, OMI, organizó la primera peregrinación anual a Lac Ste Anne en julio de 1889, me sentí tan bendecida por haber tenido el privilegio de visitar este lugar para la reflexión y la contemplación.

Antes de la visita, no era consciente de que íbamos a visitar un lugar sagrado donde miles de peregrinos se dirigen, cada año, a orillas del lago Ste Anne del 20 al 26 de julio, para curarse y renovarse espiritualmente. Este es el lugar donde todo el mundo es bienvenido, no importa de dónde vengas, qué idioma hables o qué dificultades tengas en la vida.

Este increíble y sagrado lugar, que tiene más de 100 años, se ha convertido en el mayor encuentro católico anual del oeste de Canadá, y fue visitado por el Papa Francisco el 21 de julio de 2022.

Cuando llegué allí, me sentí muy segura y muy cómoda. Me alegró ver la estatua de la abuela de Jesús, que fue la madre de la Virgen María. En la tradición indígena, la abuela (kookum) ocupa un lugar muy venerado y honrado. Es una figura de sabiduría para el pueblo, por lo que nuestra gente siente un profundo amor por la abuela de Jesús. Hice fotos para compartirlas con mis amigos, para que ellos también encuentren tiempo para visitar este lugar sagrado.

Aún recuerdo el día soleado y caluroso en que lo visitamos. El Padre mencionó que iba a llover muy pronto y, efectivamente, llovió ; el día era tan hermoso.

Durante el tiempo de oración previo a nuestra barbacoa, reflexionamos sobre la historia evangélica de la Samaritana, nos lavamos las manos unos a otros con agua del lago y cada uno recibió una copia de la Oración de la Familia de la Encarnación para llevar consigo, junto con una botella de agua del « Lago de Dios ». Disfrutamos de los versos, de las oraciones y sentí la presencia de Dios. Después de nuestra oración, los Amigos del Carisma tuvimos una barbacoa como amigos así que disfrutamos de ese día con el espíritu de Dios.

Gracias Dios, por ese día y aprecio a mis queridos Amigos del Carisma ya que todos fueron tan buenos con nosotros.

Suya, Lucia Nankya.