El homenaje de despedida a Mertxe comenzó con una Eucaristía que la comunidad parroquial, en la que tanto colaboró, le ofrecía como agradecimiento y cariño, y en respuesta a la entrega incondicional que Mertxe siempre tuvo para con su Parroquia.

El Párroco, le nombró muchas veces en momentos oportunos, por supuesto, y explicó su marcha por un año, que ella aceptó sin pensarlo un momento. Recordó todos sus « innumerables » servicios a la parroquia, a los enfermos, etc. La coral a la que pertenece Mertxe animaba la celebración, con lo que resultaba muchísimo más solemne.

En el momento de la paz, Mertxe bajó a nuestro banco y nos abrazó a cada una ; fue muy bonito. Acabada la Misa, le ofrecieron un precioso ramo de flores que entonces, y, sólo entonces, hizo que Mertxe se emocionara.

Y en ese mismo momento, espontáneamente, subió al presbiterio un joven no “tan joven” que, abrazando a Mertxe, dijo bien alto que a ella le debía el haber hecho la primera comunión. Mientras tanto el coro cantaba : Eskerrik asco Jauna… Gracias Señor… entre nutridos aplausos de todos los asistentes, fue un momento precioso y emocionante.
Al salir de la misa, además de algo « para gustar », en el salón capilla, contiguo a la entrada de la sacristía, teníamos a tres señores, con sus coches, dispuestos a subirnos al colegio de la Madre de Dios en cuanto quisiéramos y así lo hicimos.
El comedor totalmente preparado, sencillo, pero ya con « cositas » para entretenernos mientras se completaba el número de participantes : dos religiosas de Bérriz, tres de la Sagrada Familia de Burdeos, cinco de la Madre de Dios, y 10 ursulinas. Además, tres sacerdotes, y los laicos íntimos de los curas, parroquiales colaboradores, incondicionales, trabajadores sonrientes…

Después de la comida, y cuando ya pensábamos que la fiesta estaba a punto de acabar, aparece una seglar con un paquetito que entrega a Merche. Era nada más y nada menos…¡Un precioso tríptico, tipo icono, con la Virgen de Begoña en medio !. Precioso. Palabras del párroco : « ¡eh Mertxe, que es para que nos tengas presentes, etc… ! ». Entonces fue el momento de Merche : dio las gracias muy sentidamente, hizo todas las promesas del mundo de recordar a Bilbao y a la parroquia de S. Ignacio ; nuevos abrazos, aplausos,…
Pasadas las 17 h. empezamos a ocupar de nuevo los coches que nos habían traído a este lugar y regresamos a casa.
Estábamos impresionadas, no se podía pedir más, ni pensar en más. La Parroquia demostró con creces el cariño y aprecio que tienen por Merche, impresionante. El viernes, nos tocará decirle con mucho cariño : "hasta la vuelta” y ¡buen viaje !
Testimonio de un buen amigo de Mertxe
La parroquia de San Ignacio acogió ayer en la celebración de la eucaristía, el homenaje a Mertxe Uncetabarrenetxea, religiosa de la Congregación de Ursulinas de Jesús.
Aprovechamos la ocasión para tan merecido homenaje con motivo de su traslado a Francia cerca de la casa madre de la congregación.
Mertxe, natural de la Villa Foral, ha dedicado su vida a nuestro barrio, como dice ella misma ; casi lo estrenaron, cuando en 1960 empezaron a trabajar y vivir aquí, en su colegio que cerraron en 1992.
Pero posteriormente, tanto ella, como el resto de compañeras han seguido compartiendo la Oración, la Fraternidad y la Misión, en nuestro barrio.
Parece que el “ vivir la Encarnación” con todas sus consecuencias y pasar del “yo al nosotras” ha hecho que Sor Mertxe se despida con mucha paz.
Nuestros mejores deseos para esta etapa , a la espera de una pronta vuelta a esta su comunidad.
Que nuestra amatxo, la Virgen de Begoña , a quien ella tanta devoción tiene, le acompañe.